Cantando mi
voz suavemente aflora como un murmullo sin vida, casi imperceptible para quien
no la quiere escuchar, aquel necio oído que se ha negado a atender mi leve
suplica, pero tan grande y fuerte como un aguacero en el mes de abril. Porque
aquel que nada padece hace la vista gorda cuando ve a alguien pasarla mal,
porque este nuestro mundo esta lleno de hipocresía y mentiras, mentiras y
mentiras….decimos comprender a los demás cuando en realidad solo nos compadecemos
de nosotros mismo.
Viva el egoísmo
y la falsedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario